Tras la publicación ayer de dos documentos clave, el Libro Blanco sobre inmigración del gobierno británico y el plan de contingencia de la UE ante un Brexit sin acuerdo, hoy se han producido las primeras reacciones y análisis de los mismos.
Según un análisis del Financial Times, el plan de la UE sería un instrumento de transición reducido a la mínima expresión: Comparado con el acuerdo UE-RU, el plan de la UE tendría unos objetivos limitados y a más corto plazo, de aplicación unilateral.Algunas de las medidas más destacadas se referirían al ámbito de los servicios financieros, a fin de garantizar el acceso de empresas de la UE a las cámaras de compensación y otras entidades financieras con sede en Reino Unido. En el ámbito del transporte aéreo, la UE autorizará a las aerolíneas a efectuar rutas punto a punto entre la UE y el Reino Unido. Esta medida estaría vigente hasta marzo de 2020. Las omisiones más destacadas dentro del plan UE se referirían a la frontera en Irlanda del Norte, medicamentos, chequeos veterinarios, pesca o servicios no financieros.
Ante una posible salida sin acuerdo, la ministra de trabajo y pensiones Amber Rudd ha declarado en una entrevista en ITV que en el caso de que el acuerdo UE – Reino Unido no se apruebe, sería preferible convocar un nuevo referéndum antes que dejar el bloque europeo sin acuerdo. Se trataría de la primera ocasión en la que un alto cargo del gobierno británico se muestra partidario de un nuevo referéndum.
En cuanto al nuevo marco migratorio que propone el libro blanco, establece un sistema basado en la formación y experiencia de los trabajadores extranjeros independientemente de su país de origen. En lo que respecta a los ciudadanos de la UE, este nuevo marco (si finalmente se convierte en ley) se aplicaría una vez concluido el periodo de transición, o bien tras la salida una salida sin acuerdo del Reino Unido de la UE.
No obstante, el documento establece un sistema transitorio para ciudadanos europeos, que entraría en vigor una vez que termine la libertad de movimiento en el Reino Unido, y estaría vigente hasta el año 2025. Este sistema transitorio permitiría obtener visados de trabajo de un año, sin necesidad de una oferta previa de empleo en el Reino Unido. Sería un visado abierto a empleados de cualquier nivel de formación y experiencia. Sin embargo, sería necesario obtener el visado antes de entrar al Reino Unido, el visado no sería renovable ni facilitaría la obtención de otro visado que permita al trabajador prolongar su estancia en el Reino Unido, y tampoco le permitiría desplazarse al país con sus familiares.
Por último, el libro blanco propone la extensión del visado “YouthMobility Visa” a ciudadanos de la UE. Este visado autoriza a ciudadanos de entre 18 y 30 años de ciertos países a trabajar por un periodo de hasta 2 años en el Reino Unido.
Conviene destacar que no se prevén cambios a la hora de realizar viajes de corta estancia (turismo y negocios), y bastará un pasaporte en vigor para poder visitar el Reino Unido. En cualquier caso, la Comisión Europea ha publicado un documento que recoge una serie de recomendaciones de viaje en el caso de una salida del Reino Unido sin acuerdo.
